Lubbers, de 64 años, fue nombrado máximo responsable de ACNUR en enero de 2001 y desde entonces ha tenido que hacer frente a crisis en varias naciones de África Occidental, Asia y Afganistán.
En este último país la ONU llevó a cabo una de las mayores repatriaciones de la historia, en el transcurso de la cual regresaron a sus hogares más de dos millones y medio de personas tras la caída del Talibán.
Ciudadano de Holanda, país del que fue primer ministro doce años, Lubbers ha impulsado la creación de proyectos locales en zonas con alto número de refugiados para que puedan formarse y prepararse para volver a sus poblaciones. También ha abierto un debate con gobiernos de la Unión Europea sobre las condiciones cada vez más duras que plantean a las solicitudes de asilo.