CIUDAD DE GUATEMALA – ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, da la bienvenida al establecimiento de una nueva unidad de asilo en Guatemala que tendrá capacidad ampliada para recibir, procesar y adjudicar solicitudes de asilo en el país.
“Este es un paso crucial en la dirección correcta, que protegerá mejor a los refugiados y garantizará un camino más seguro, humano y eficiente hacia la seguridad”, dijo José Samaniego, Director Regional de ACNUR para las Américas.
“Estamos comprometidos con el fortalecimiento del sistema de asilo en nuestro país; es un desafío que sabemos que requerirá mucho esfuerzo, tiempo, recursos financieros y responsabilidades compartidas ”, dijo el presidente guatemalteco Alejandro Giammattei.
Guatemala, uno de los tres países del norte de Centroamérica, es un país de origen, tránsito y asilo de personas obligadas a huir de sus hogares. En 2020, un total de 487 personas solicitaron la condición de refugiado en el país, un aumento del 85 por ciento con respecto a 2018.
La mayoría de los solicitantes de asilo son de Honduras, El Salvador y Nicaragua. Se espera que esta tendencia continúe en los próximos años, ya que las personas en Centroamérica continúan siendo desplazadas por la fuerza por la violencia y la persecución.
ACNUR acogió esta semana la terminación recientemente anunciada de los acuerdos bilaterales entre los gobiernos de Estados Unidos y Guatemala, Honduras y El Salvador conocidos como Acuerdos de Cooperación en materia de Asilo (ACA). Si bien el ACNUR nunca fue parte de esos acuerdos ni participó en su implementación, expresó a los respectivos gobiernos los riesgos de protección que representaban, así como la posibilidad de devolución en cadena.
Guatemala está haciendo un esfuerzo significativo para acoger a quienes necesitan protección internacional aumentando su capacidad para procesar solicitudes de asilo a pesar de los desafíos que enfrenta, incluidos los relacionados con el impacto de las devastadoras tormentas recientes y el COVID-19.
El nuevo Departamento de Reconocimiento de la Condición de Refugiado del Instituto de Migración (IGM) de Guatemala, contará con psicólogos, trabajadores sociales y abogados, atenderá las necesidades de los solicitantes de asilo y procesará sus solicitudes.
El ACNUR contribuyó al establecimiento de esta instalación, proporcionando tecnología y equipo, con el apoyo de contribuciones financieras del gobierno de los Estados Unidos.
La iniciativa forma parte de los compromisos de Guatemala como parte del Marco Regional Integral de Protección y Soluciones (MIRPS), luego de varios años de trabajo conjunto en la creación de espacios de protección para los refugiados que llegan al país.