Apodado el Convenio de Estambul, el Convenio del Consejo de Europa para prevenir y combatir la violencia contra las mujeres y la violencia doméstica, es el «primer y más completo» tratado internacional que aborda específicamente estos temas, dijeron las agencias de la ONU en un comunicado .
“Nos preocupa que la retirada de Turquía del Convenio de Estambul socave los importantes esfuerzos invertidos hasta ahora para prevenir y combatir la violencia contra la mujer y pueda obstaculizar el progreso hacia un mayor fortalecimiento de los marcos legislativos, políticos e institucionales nacionales”, dijeron.
La violencia contra las mujeres es una preocupación particular en Turquía, y la última Investigación Nacional sobre la Violencia contra las Mujeres (2014) informa que el 38 por ciento de las mujeres que alguna vez se casaron fueron sometidas a violencia física y / o sexual en su vida.
“En su forma más extrema, ya menudo como el acto final de un continuo de violencia, cientos de mujeres son asesinadas cada año”, dijeron las agencias.
También señalaron que en 2012, Turquía se convirtió en el primer país en ratificar la Convención y que también tomó medidas clave para alinear su legislación nacional con el acuerdo, incluso mediante la adopción de una ley sobre la protección de las familias y la prevención de la violencia contra la mujer.
“Instamos al Gobierno de la República de Turquía a que continúe protegiendo y promoviendo la seguridad y los derechos de todas las mujeres y niñas, incluso permaneciendo comprometidos con la plena implementación del Convenio de Estambul”, agregaron las agencias.
Violación de derechos humanos ‘más generalizada’
La violencia contra las mujeres y las niñas es una de las “violaciones de derechos humanos más generalizadas” en el mundo.
Se estima que en todo el mundo una de cada tres mujeres es sometida a violencia física o sexual por parte de su pareja íntima o violencia sexual por parte de una persona que no es su pareja durante su vida, un número que se ha mantenido prácticamente sin cambios durante la última década, según las agencias de la ONU.
El brote de la pandemia de coronavirus provocó una mayor escalada de violencia contra mujeres y niñas a nivel mundial, debido a restricciones de movimiento, aislamiento social e inseguridad económica.
Se necesita una acción ‘más audaz y revolucionaria’
La pandemia también reveló las brechas en los sistemas para responder a tal violencia y la aguda necesidad de responder con firmeza y unidad , dijo ONU-Mujeres , la entidad focal de la Organización para la protección de los derechos de las mujeres, en un comunicado separado.
“La solidaridad de las naciones que conlleva ser parte de las convenciones internacionales es fundamental para un mundo libre de la ‘ pandemia en la sombra ‘ de la violencia contra las mujeres”, destacó.
ONU-Mujeres recordó el sexagésimo quinto período de sesiones de la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer y pidió «acciones más audaces y revolucionarias que sigan haciéndonos avanzar, a fin de garantizar que las mujeres y las niñas vivan libres de violencia».