La Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitario (OCHA) advirtió este lunes que, sin un acceso sin trabas a Gaza, las organizaciones de ayuda no pueden prepararse adecuadamente para la estación de lluvias, durante la cual se espera que aumenten aún más las necesidades de la población.
El organismo indicó que las lluvias y las inundaciones no harán sino empeorar las condiciones de vida en la Franja, aumentando el riesgo de peligros para la salud, y pueden provocar nuevos desplazamientos de cientos de miles de personas.
Muchos de los 215 espacios temporales de aprendizaje que atienden a casi 34.000 niños se verán gravemente afectados por las inundaciones.
Las agencias se preparan para el invierno
La ONU y los socios humanitarios han desarrollado un Plan de preparación para el invierno para atender las necesidades más críticas de más de 2,1 millones de personas en Gaza durante la estación de lluvias, informó OCHA.
Este plan, que forma parte de un llamamiento urgente más amplio para el Territorio Palestino Ocupado, está dirigido a más de 850.000 personas de casi 50 barrios situados en zonas propensas a las inundaciones.
Requiere 242 millones de dólares para mejorar las condiciones de los refugios, proporcionar ropa de abrigo y mantas, y desviar el agua de las inundaciones lejos de infraestructuras críticas y vertederos, entre otras intervenciones.
Sin embargo, la agencia subrayó que estos planes no solo requieren la entrada sin trabas en la Franja de los artículos humanitarios necesarios, sino también del combustible adecuado y la facilitación de movimientos humanitarios seguros entre los almacenes y los puntos de distribución.
Montañas de basura
Mientras tanto, la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA) indicó en una publicación en X que “montañas de basura se amontonan en las zonas medias de Gaza mientras las aguas residuales se filtran a las calles”.
“Las familias no tienen más remedio que vivir junto a los residuos acumulados, expuestas al hedor y a la amenaza de un desastre sanitario inminente. Las condiciones sanitarias y de vida en Gaza son inhumanas”, prosiguió la organización.
“Por eso enfermedades como la polio reaparecieron”, dijo a este respecto el comisionado general de la UNRWA en una rueda de prensa en Ginebra, añadiendo que, a casi un año del inicio del conflicto, la situación es una “pesadilla sin fin”.
Philippe Lazzarini recordó que la población está “atrapada” en el 10% del territorio de Gaza, tras estar constantemente en movimiento.
También estiman que hay 620.000 niñas y niños en Gaza “viviendo entre los escombros y profundamente traumatizados”.
La educación, una prioridad
Lazzarini afirmó haber pedido a los Estados que hagan de la educación una “prioridad colectiva” más allá de las actividades para salvar vidas y brindarles apoyo psicosocial.
El director de UNRWA explicó que la agencia ha “comenzado a devolver a los niños a los ambientes educativos, con prácticas de lectura, escritura y matemáticas básicas, a pesar del muy complicado entorno en el que se encuentran”.
“Nunca debemos olvidar que el único bien que nunca ha sido arrebatado a los palestinos es la educación. En las últimas décadas, han sido despojados de muchas cosas, pero no de la educación. Ha sido siempre uno de sus grandes orgullos”, explicó.
El responsable de la agencia también se refirió a la situación en Cisjordania, la cual calificó de “tragedia silenciosa en desarrollo”. Lazzarini señaló que están observando la repetición del mismo modus operandi: siempre que hay una operación secreta en los campos, esta termina generando una “destrucción a gran escala de infraestructuras públicas, infringiendo un castigo colectivo a la población”.
Ataques a la UNRWA
Por último, el comisionado general se refirió a los “ataques constantes” que ha sufrido la agencia en los últimos meses, los cuales han causado la muerte de 223 miembros del organismo y la destrucción o deterioro de dos tercios de las instalaciones. También hay un “esfuerzo legislativo” para desalojar a la UNRWA de sus locales en Jerusalén Este y dejarles sin privilegios ni inmunidad y catalogarlos como una organización terrorista.
“Creo que es totalmente inconcebible que un Estado miembro de la ONU decida calificar de organización terrorista a un organismo de la ONU creado por mandato de la asamblea general de la ONU (…) Sería un precedente que debilitaría el instrumento colectivo de nuestro sistema multilateral”, declaró.
En cuanto a los asuntos de neutralidad, Lazzarini señaló que han adoptado las recomendaciones de los informes y las revisiones; aunque las nuevas denuncias serán investigadas y han sido tomadas “muy en serio”, señaló que buscan despojar a los palestinos de su estatus de refugiados y modificar los parámetros de una solución política.
También hizo un llamamiento a los países para que rechacen los intentos de terminar con la reputación de la UNRWA.
Por otro lado, UNRWA confirmó que un individuo que ha muerto en un bombardeo israelí en el Líbano y que ha sido descrito como un líder de Hamás en ese país trabajó para ellos. Tras recibir alegaciones de su posible afiliación, UNRWA le suspendió sin sueldo en marzo y se encontraba en investigación.
Lazzarini recordó que UNRWA ha solicitado a las autoridades israelíes que si tienen información acerca de individuos que puedan ser sospechosos, las compartan, lo que Israel no ha hecho.