La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos expresó su creciente preocupación por las operaciones militares israelíes en el norte de Gaza, advirtiendo de que la combinación de ataques incesantes, desplazamientos forzosos y severas restricciones a la ayuda humanitaria “puede estar causando la destrucción de la población palestina” de la zona.
La vida se ha vuelto “imposible” para los civiles atrapados en el norte, en medio de repetidas órdenes de desplazamiento para toda la gobernación y de un acceso muy limitado a suministros humanitarios esenciales, lo que ha dejado a muchos enfrentándose a la inanición, dijo la Oficina el domingo.
“Aunque el ejército israelí ha exigido que todos los civiles abandonen el norte de Gaza, ha seguido bombardeando y atacando sin descanso la zona, especialmente el campamento de Jabalya y sus alrededores. Estos ataques han hecho extremadamente peligrosa la huida de los civiles”.
También informó del temor entre los palestinos a que marcharse pudiera significar que nunca se les permitiera regresar a sus hogares.
Las fuerzas israelíes han destruido viviendas y escuelas que servían de refugio, dejando a muchos civiles sin uno a medida que se acerca el invierno.
La Oficina recordó a Israel las medidas provisionales ordenadas por la Corte Internacional de Justicia en enero de 2024 para que «adopte todas las medidas a su alcance» para impedir un genocidio.
Guterres condena el ataque en Beit Lahiya
El secretario general de la ONU condenó este lunes la «continua y generalizada» pérdida de vidas en Gaza, incluidos los ataques israelíes contra un bloque de viviendas en Beit Lahiya el sábado, en los que murieron 87 personas, según el Ministerio de Sanidad gazatí.
«Los civiles deben ser respetados y protegidos en todo momento» declaró el portavoz adjunto de la ONU, Farhan Haq, en una rueda de prensa en Nueva York, añadiendo que António Guterres “sigue profundamente alarmado por el rápido deterioro de la situación de los civiles en el norte de Gaza, incluidos los desplazamientos masivos y la falta de artículos de primera necesidad para sobrevivir”.
Guterres pidió el acceso inmediato y sin trabas de los equipos humanitarios y de rescate para que puedan continuar su labor de salvar vidas.
«Los recientes ataques contra hospitales en el norte de Gaza están exacerbando una crisis humanitaria ya de por sí grave y poniendo en grave peligro la vida de decenas de miles de personas», continuó Haq, pidiendo a los combatientes que protejan a los pacientes y al personal médico.
Ataques a hospitales
En este sentido, los hospitales luchan contra la grave escasez de combustible y suministros médicos, y los equipos de rescate informan de que han sido bloqueados o atacados mientras intentaban salvar vidas.
El responsable de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA) declaró en las redes sociales: “Los hospitales han sido atacados y se han quedado sin electricidad, mientras que los heridos se han quedado sin atención”.
“Negar y convertir en arma la ayuda humanitaria para lograr fines militares es una señal de lo baja que está la brújula moral… nadie debería suplicar ayudar o ser ayudado”, añadió Philippe Lazzarini.
Cada minuto cuenta
Por su parte, la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) instó a las autoridades israelíes a permitir el acceso inmediato para rescatar a las decenas de personas que siguen atrapadas bajo los escombros, asegurando que llevan pidiendo acceso desde el pasado viernes.
“Las autoridades israelíes han denegado hoy, por cuarto día consecutivo, nuestra solicitud urgente de acceso a la zona de Falouja en Jabalya, en el norte de Gaza, para ayudar a las personas atrapadas bajo los escombros. Reiteramos: estos retrasos pueden costar vidas.”, señaló en una publicación en X.
Además, se ha interrumpido el acceso a internet y han muerto al menos tres periodistas palestinos, lo que ha limitado el flujo de información desde la región.
La guerra debe terminar ya
El coordinador especial de la ONU para el Proceso de Paz en Oriente Medio también condenó los continuos ataques.
“La pesadilla en Gaza se intensifica. En el norte de la Franja se están produciendo escenas espeluznantes en medio del conflicto, los incesantes ataques israelíes y una crisis humanitaria cada vez peor”, declaró Tor Wennesland en un comunicado el domingo.
Pidió el fin inmediato de la guerra, la liberación de los rehenes en manos de Hamás y el fin de los desplazamientos forzosos. Hizo hincapié en la necesidad de proteger a los civiles y permitir la ayuda humanitaria sin trabas.
“El camino que tenemos por delante requerirá valentía, voluntad política y un diálogo renovado. Se lo debemos a las familias que sufren en Gaza e Israel. La guerra debe terminar ya”.